Hay algo seguro en nuestro caminar con Dios, vamos a pasar por diferentes tipos de prueba.
Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.
Juan 16:33
Marcos 4:35 - 41 Nos enseña una gran verdad, aun cuando hacemos la voluntad de Dios obedeciendo a sus instrucciones vienen tormentas para revelar nuestro corazón y ver si estamos listos para lo que viene por delante.
Jesús les dijo: Subamos a la barca y pasemos al otro lado, con esto les dijo vamos hacer esto y cuando lo hagamos vamos a llegar a nuestro destino.
Una tormenta muy fuerte vino, los discípulos tuvieron miedo y despertaron a Jesús para decirle: Maestro, ¿no tienes cuidado que perecemos? el temor en ellos cancelo por completo lo que les había dicho, que llegarían al otro lado.
Los discípulos le reclaman, ¿no te importa que vamos a morir? ¿no te importa lo que nos va a suceder que duermes?
Y levantándose Jesús, reprendió al viento, y dijo al mar: Calla, enmudece. Y cesó el viento, y se hizo grande bonanza. Y les dijo: ¿Por qué estáis así amedrentados? ¿Cómo no tenéis fe?
Debemos tener esta seguridad, si viene la prueba pretendiendo destruirnos, también vendrá la paz para darnos la certeza que fiel es quien esta con nosotros para llevarnos a puerto seguro.
Académicamente cuando se nos pasan un examen, las instrucciones son: resuelva usted mismo la prueba, haga silencio, no copie y entréguelo al terminar. Si gana el examen esta listo para el siguiente nivel.
Dios tiene planes de bien y no de mal dice su palabra, eso quiere decir que aunque vengan dificultades, en el plan del Padre alcanzarás lo que esperas.
Si sientes que no puedes continuar a causa de las tormentas que han venido sobre ti, escríbenos queremos apoyarte espiritualmente.
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